JUEVES 24 IFRANE-FEZ-MELILLASans frontieres estaba llegando a su fín, pero aún nos faltaba contemplar una de las facetas más característica de marruecos, su artesanía y su comercio, y que mejor que la ciudad santa de Fez para que tuviéramos una estupenda muestra de todo esto.
Abandonamos el hotel y nos ponemos en ruta, ya por carretera (adiós pistas, adios desierto....) con intención de llegar a nuestro destino lo antes posible.
Teníamos previstos 315 km por lo que no nos convenía retrasarnos al tener que llegar a melilla y atravesar la frontera, que siempre se trata de un reto , o en el mejor de los casos..una incógnita.
A las dos horas de viaje llegamos a esa ciudad impresionante: Fez
Se trata de la tercera ciudad más grande de marruecos, con más de 2.000.000.- de habitantes, caracterizada por ser el centro cultural y religioso marroquí.
La primitiva ciudad medieval se disponía alrededor de la medina, y a partir de ahí se fue desarrollando progresivamente.
El caos circulatorio de la ciudad era importante, muchisimo tráfico, muchísimos semáforos...y ahí me acordé de nuestras benditas emisoras...Habría sido imposible circular por Fez sin ellas. Nos habríamos perdido todos...seguro¡¡
Una vez que conocimos a nuestro guía y tras dejar aparcados y bién custodiados los vehículos nos sumergimos a pie en la borágine de Fez.
Germán, nuestro guía lo había organizado estupendamente, ya que llevábamos a un guía delante que nos iba explicando las curiosidades de la ciudad, otro en la cola para ir recogiendo a los rezagados y a los "pesados" que no paraban de disparar fotos

y germán iba en medio controlando todo el grupo...No era difícil distinguirno a kilómetros por nuestros coquetos polares rojos de Sans Frontiéres
Las calles eran estrechísimas...laberínticas...una auténtica pasada...y todas plagadas de pequeñas y no tan pequeñas tiendas ofreciéndote de todo lo que podáis imaginar....impresionante.
Ni qué decir tiene que las calles eran todas peatonales....sobre todo porque cualquier cosa que fuera más grande que un carretillo lo tenía complicado para pasar....
Lo primero que tuvimos que aprender es que cuando oyéramos que alguien decía algo parecido a ...YAMAJA, YAMAJAAA...significaba que había que apartarse a un lado de inmediato ya que venía un mulo cargado con mercancías morunas, un tuareg tirando de un carretillo o un beduino encima de un búfalo...fuera lo que fuese había que apartarse porque tenían preferencia de paso y si el bicho te pisaba me temo que íba a doler....
De esta guisa fuimos recorriendo, alucinados, la enorme y vistosa medina, mucho más grande y más desmesurada que cualquier otra que antes hubiéramos visto por Marruecos.
Los guías tuvieron el tino de llevarnos a ciertas tiendas concertadas donde quien quiso pudo hacer sus compras tranquilamente.
De esta manera visitamos una marroquinería, una tienda de tapices y telas, una perfumería y tienda de productos exóticos y aceites...
Echamos toda la mañana para visitar la medina y tras un breve descanso en el que repusimos fuerzas tomándonos un té en una terracita en medio de aquella borágine, momento en el cual un ávido comerciante se fijó como objetivo venderle no se que mierda contrachapada a Pedro....y el pobrecito mio no tuvo más remedio que ceder por miedo a que le persiguiera hasta Murcia¡¡¡¡
Una vez las fuerzas fueron restablecidas volvimos a nuestros coches para, una vez desembarazados del caos circulatorio de esa ciudad poner rumbo a la autopista con destino a Melilla.
Como ya apuntaba luipy, la puñetera ley de Murphy siempre se cumple: hemos estado rodando por desierto pedregoso, por desierto arenoso, hemos ido a toda hostia por todos los lados y ni un puto pinchazo...hasta que por fín cogemos buén asfalto....esta vez me tocó a mí y mi abderramán pinchó la rueda delantera derecha.
Aprovecho esta circunstancia para resaltar lo bién que se comporta un Cx ante esta adversidad...tan bién, tan bién.....que no notas que has pinchado¡¡¡¡
Yo me dí cuenta porque el coche poco a poco se fue ladeando hacia el lado del pinchazo, pero sin perder ni un momento la trayectoria...ni un extraño.....nada¡¡¡
En el momento en que empezaba a pensar que algo raro sucedía fue julito el que por la emisora me advertía de que parecía que llevaba una rueda desinchada....alucinante¡¡
La rueda fue tanto tiempo sin aire que se quemó absolutamente por dentro, y como digo, la respuesta del coche fue la de un tren sobre railes.
Paramos en un área de servicio de la autopista y mientras cuñaín, deivi, Julito y jose Luis me cambiaban la rueda (yo no podía hacer nada...estaba llorando cual magdalena por las esquinas del disgusto....

) aprovechamos la parada para celebrar el ultimo y divertido Picnik de SF 2016.
Restablecida la marcha, ya sin mayores incidencias fuimos aproximándonos a Melilla mientras la noche se nos echaba encima....
He dicho sin incidencias??? pues no, al menos una más tenía que acontecer.....